Bendito seas Señor, por tu infinita bondad, porque pones con amor sobre espinas de dolor, flores de conformidad.
Traigo en mi alma escondido un sentido de pesar, más mis labios se abren en un cantar para callar mi gemido.
Sólo tú, Dios y Señor, tú me habrás de comprender!
Porque pones con amor sobre espinas de dolor, flores de conformidad.
Por tu bondad y tu amor, porque lo mandas y quieres, bendita sea, oh Señor, la mano con que me hieres!
Romanos 8:28 “Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan para bien, esto es, a los que conforme a su propósito han sido llamados”
