Jubileo de damas

Tana Concepcion Grullon / El pasado Sábado 23 de mayo, la Sociedad de damas llevó a cabo con mucho éxito su jubileo de damas, en el que estuvieron predicando los Pastores Verónica y Norberto de León, de la iglesia ” Yo sé que mi Redentor vive”, ubicada en Reading, Pensilvania.
En la mañana nos predicó la Pastora Verónica de León, quien nos trajo una maravillosa ponencia sobre  el importante papel que ha desempeñado la mujer en el desarrollo y expansión del evangelio, a través de la historia.
En la tarde, el Pastor Norberto de León nos trajo una prédica sobre la importancia de tener discernimiento de espíritu en estos últimos tiempos, bajo el tema “Se parece, pero no es”, tratando 1era. Samuel capítulo 16:7,  donde vemos que Dios envía a Samuel a ungir a un nuevo rey, ya que Saúl había sido desechado.  En dicho versículo, nuestro Señor le hace una advertencia al profeta Samuel, de que no se deje llevar por el aspecto físico de quien vaya a escoger, porque “Jehová no mira lo que mira el hombre; pues el hombre mira lo que está delante de sus ojos, pero Jehová mira el corazón”, reza parte del versículo antes mencionado. Y es que como bien dice ahí, lo importante para Dios, no es el físico de la persona, sino lo que hay en la profundidad de su corazón, y eso sólo lo conoce el Padre; de ahí la importancia de ser guiados por Él, y no por emociones o el aspecto de la persona. Y es que en la actualidad es fácil, muy fácil, que nos engañen.
“En el monte es donde Dios prepara a los guerreros para la batalla” decía el Pastor De León.
Ya conocemos la historia, donde desfilaron los hijos de Isaí delante de Samuel, y a todos los desechó Dios; pero Isaí no presentó a David, porque aún siendo su padre, lo tomó en  poco, más Dios le mandó llamar, y le ordenó a Samuel que lo ungiera como rey.
David, era pequeño de tamaño, pero había conocido el desierto, enfrentándose a osos, leones, etc.,  que trataban de comerse las ovejas que cuidaba. Los mataba con sus manos, o sea, era valiente y sabía defender el rebaño que estaba a su cuidado; además,  y lo más importante, es que tenía el corazón conforme al de Dios
La gente hoy en día quiere posiciones, más no quieren pasar por el desierto, no quieren pagar el precio.
Por eso, como bien dice el título del mensaje, no debemos dejarnos engañar por la apariencia de la persona para darle un puesto, sino, que sea Dios que por medio del discernimiento de espíritu, nos guíe, porque en la actualidad hay muchos lobos vestidos de ovejas, que sin la revelación divina, pueden engañarnos y llevar el pueblo a confusión, y caos.
Dios bendiga a los Pastores De León, y los siga usando como vasos de honra para el Señor.