Tana Concepcion Grullon / Meditación :Hay un himno precioso que dice ” y me levantaré como las águilas, por el poder de tu amor”.
Meditando en porqué el Señor usó al águila como un ejemplo para nuestra vida espiritual, llegué a la conclusión de que esta ave posee cualidades muy especiales:
1.- Tiene una visión que aún desde una distancia extremadamente grande, puede ver a su presa. Nuestra presa debe ser dominar los deseos de la carne.
Esa misma visión, tipifica el discernimiento que debemos tener como hijos de Dios.
2.- Su precisión y coordinación:
Simplemente abre sus gigantescas alas y se remonta vertiginosamente, dependiendo de forma total de las corrientes del aire para mantenerse arriba.
3.- Vive en las alturas, como nosotros debemos vivir espiritualmente.
Por el contrario, nosotros batimos las alas tratando de ser mejores personas.
Nos afanamos por vivir una vida adelantada en el tiempo. Trabajamos hoy, y ya estamos preocupados de lo que haremos mañana. Nos esforzamos de dejar nuestros viejos hábitos, mejorar nuestro carácter. Pero en lugar de elevarnos a las alturas (espiritualmente hablando), nos mantenemos en el fondo del afán con las alas cansadas.
Esto se debe a que aveces confundimos lo que hace que una persona sea madura espiritualmente hablando.
Madurez espiritual es reconocer que somos incapaces de cambiar por nosotros mismos. La carne es corrupta! No puede ser dominada por ningún método humano. Pero el Señor Omnipotente vence nuestros impulsos carnales por medio del Espíritu Santo.
Mientras otras personas se fatigan tratando de ser buenos, el creyente maduro confía en Dios, y “levantará alas como las águilas”
“Pero los que esperan en Jehová tendrán nuevas fuerzas; levantarán alas como las águilas ; correrán, y no se cansarán; caminarán y no se fatigarán”.Isaías 40:31
Dios es el que da fuerzas al cansado. Ríndete a los brazos del Rey, y no confíes en tus propias fuerzas.
A volar águilas!
Que el Dios de paz me los bendiga!
